domingo, 1 de mayo de 2022

 Marta, no te lo vas a creer.

Once años después, 

otro monstruo igual.

Tiene el miedo sabor a metal, una lengua alargada,

afilada y puntiaguda.

El miedo y la desconfianza, pequeña,

la soledad y el silencio, enana.

No sabes cómo pero no es que estés otra vez aquí.

Nunca has salido.

El miedo, la soledad y la desconfianza, enana.

Nadie le dice a la niña pequeña,

nadie le explica nada.

Y entendemos a los locos,

a los suicidas,

a los abrumados,

a los incomprendidos.

Cinco mujeres y tres hombres gritan,

lo gritan.

No sé como hacerlo, 

NO SÉ QUÉ HACER

no

lo

sé.

Y entonces ves a tu madre, a ti, tú pequeña.

Protegedla

PROTEGEDLA!

que no toquen a la niña, que no le lleguen los problemas,

miradla,

que alguien le explique, que alguien le diga que el dolor llega y se va o se queda.

Marta, ¿sigues ahí?

Atenta, 

mamá no es dios, ni tu salvavidas.

Mamá no te enseñará a sentirte segura.

Marta, ¿sigues ahí?

¿tienes miedo?

¿Marta? 

Marta, por favor, tú no te ausentes.

viernes, 14 de febrero de 2020

No sé ni de que voy a escribir hoy,
tal vez de nada o de todo.
De mi teoría universal del mal del humano,
sobre el nuevo siglo de la soledad o
sobre una puta mierda.
¿Qué quiero comunicar hoy?
Siento la ansiedad del mundo sobre mi pecho,
la desazón de lo incierto del futuro y del presente.
De las dudas del pasado que se marcan cuando se entremezclan con las del presente.
Quiero comunicar, que no tengo ni idea de qué cojones quiero decir,
y tengo derecho a no saberlo, a no saber absolutamente nada,
a excepción de que estoy frustada, ansiosa, cansada, pequeña, triste y de alguna extraña manera
sola, siempre sola en el mundo eterno del no saber y sentirlo todo rechazando sentir algo.

martes, 30 de julio de 2019

La nena que mama de la mamá que ama.

He debido enloquecer de nuevo.
Estoy aquí, sentada escribiendo y entiendo lo que sentí, lo que siento.
He tardado dos años en volver a callar.
A callar tanto que al final solo me queda la palabra que lo dice todo en silencio.
Me siento palabra porque nací oración.
Nací pronto del útero de una madre que me acunó.
Un útero loco por crecer,
una mujer loca por sentir,
una hija loca por sufrir.
El útero muere,
la mujer sufre,
la niña palabra-oracion escribe,
"Ay máma, ay máma"
La mira prudente y no tiene palabras,
no hay nada que diga, nada que haga,
ahora ya nada.
La hija enloquece pide soga y alivio,
"Ay máma, máma".
Máma, si tú supieras y yo te contara,
lloro tres veces al día, a veces no como,
otras no duermo.
Ya no amo, máma, no quiero, no siento.
"Ay máma, máma".

viernes, 12 de octubre de 2018

Vx2

Una vez alguien me dijo que cuando me desnudase de verdad el mundo vería la magia de mis palabras y tanto fue lo que me desnudé cuando se fracturó mi alma que me desbordé y capture cada mota de polvo que había en el mundo y me quedé palpitante gritando tanto en tan poco que se paró mi corazón.
"Uno no sabe lo que le van a gustar las fresas con nata hasta que las prueba".
Aún me recupero de la vida que se plantó en mi casa destrozando todo a su alrededor haciéndome sentir como víctima de un atentado. Como si todo lo que sucedió no hubiese sido otra cosa más que el terrible plan de algo que sin tener en cuenta a los testigos los arrastró.
Ha sido un tsunami emocional que me ha quitado tanto como me ha dado. Se ha llevado tanto polvo como la lluvia de otoño y al final florece porque ya pasó el invierno. Hay tantas mujeres increíbles en mi vida con corazones de acero brotando flores, que crean ríos, magia, estela y dan sentido al mundo, que me avergüenza no estar a su altura. 
Crecer es obligatorio y no se hace sentado gritando al mundo lo injusto que fue Zeus por no mecerte Musa, Cariátide, Dione. Crecer es otra cosa; es algo que duele cuando sana y ríe cuando avanza. La vida cura y eso es bonito. Rodearte de magxs que sacan de su chistera magia es sobrenatural y convence a la fe para seguir creyendo.
Ni sonreír es obligatorio ni tampoco lo es marcar tempos. La vida no impone, no juzga, sólo ofrece más oportunidades, más aprendizaje y más y más mujeres en bicicleta y atardeceres en la Toscana y cervatillos rugiendo todo aquello que se queda entre tus cuerdas vocales y tu alma.
Así que gracias a la vida que me ha dado tanto.

domingo, 24 de junio de 2018

Lo que tú me has dejado,
eso que resbala mis mejillas con desconfianza.
Llorar por miedo a la mentira,
porque siempre hay otra estrella.
Porque nunca es suficiente la magia.
Yo te di la fuerza para romper corazas porque tú me las arrancaste.
Te llevaste la fe en el semejante.
He acabado siendo sola,
me has dejado Amelie.
Y me aislo en una isla lejos de la confianza, cerca del miedo.
Trabajo, gente y vuelta.
Tengo tu cuadrante en mis pulmones.

jueves, 21 de junio de 2018

Tendería un paracaídas enorme a tus espaldas para aliviar todo el odio del mundo.
Abrazaría todos los miedos para aliviarlos.
Trazaría una línea impenetrable entre el mal y tú.
Sagrado mortal con corazón de bronce.
Guiaría tus errores justificándolos como míos.
Te protegería hasta la locura haciendo de ti una burbuja de magia, pero no puedo, sin embargo, te tiendo mi mano.
Estoy a tu lado.

lunes, 18 de junio de 2018

He follado como un adulto.
Uno de esos grises que grita con la boca llena de comida "¡Penalti!" Y mira al cuerpo con el deseo que se le tiene a la carne independientemente de lo de dentro.
Hoy fui sexo por sexo y sin embargo no me sentí recipiente.
La reciprocidad, el respeto, el acuerdo y un gracias.
Decir a bocajarro "apréndete la lección mejor para la próxima", y decir abiertamente "no me he corrido, pero gracias por jugar".
Y la risa, el pique, la despreocupación absoluta de que esa persona no vuelva a cruzar la puerta y sin rencor.
Es gracioso aprender a haber follado como un adulto, espero desaprenderlo pronto, pero joder, qué pasada.

domingo, 13 de mayo de 2018

Nunca entendí por qué en las discusiones no me gustaba zanjar, cerrar, ganar.
Tampoco entendí por qué se discutía.
En qué momento la conversación se torna gris y toma en concepto de discusión.
Un día, mientras hablaba pude haber 'ganado' y vi el concepto como una guerra.
Si dos corazones duelen no hay ganador, porque, ¿Dónde está la sensación de victoria?
No sé cómo son las guerras,
pero sé cómo son las discusiones y no me gustan, los límites, la incomprensión, el cerrarse en banda.
Tal vez necesito seguir sanando y en éste proceso, hoy gano, a mi, porque necesito tener mi última palabra, liberarme de lo tóxico.
¿Por qué tiene que haber un malo? Por qué la gente no pudo ser como tú y yo, que simplemente vimos la bifurcación y entendimos que no queríamos ir al mismo lado, y te solté la mano y tú besaste mi frente y durante un instante nos amamos más que nunca, porque nos dejamos libres, sin reproches.

viernes, 4 de mayo de 2018

Hago un llamamiento,
a las empresas, jefes, compañeros.
A la empatía, al exceso de trabajo,
a la falta de respeto.
Seguimos vivos, pero no vivimos.
Nos estáis quitando el aire.
Nos asfixiamos, caemos rendidos,
dormimos sobre músculos montados,
sobre piernas débiles.
Tengo la mente a mil por hora,
el corazón acelerado, no duerme mi mente,
me cuestiono.
Y así todos en los pasillos, lloran.
En los fisios lloran, en consultas cerradas de médicos que lloran sobre otros por una sociedad infeliz que muere por falta de aire, por falta de empatía, por falta de humanidad.

martes, 27 de marzo de 2018

Lo malo nunca fueron los monstruos que te sobrevuelan cuándo necesitas aire.
Lo malo nunca es saber tu debilidad.
Lo bueno, es saberla, conocerla, hacer con las manos el recorrido de tus cicatrices y llorar por ellas sí te lo pide el corazón.
Y crear y creer en lo maravilloso de ésto; de tenerlos presentes siempre a los cuervos y ver sobrevolar a los buitres y mantenerlos a raya.
Todos tenemos un pasado que se hace tan presente que da pánico y te paraliza, pero avanzar, seguir luchando por ser tu dueña eso es el objetivo de la vida, vivir aún sabiéndote débil pero siempre con un par de ovarios.
Comerte la vida sin dejar que ella te engulla y disfrutar de cada mordisco porque no somos eternos y saber lo relativo, lo fugaz de todo en la vida eso es una paz inexplicable, porque todo pasa y por eso no hay que dejar escapar nada.

domingo, 25 de marzo de 2018

Tengo 22 años y a los cinco me di cuenta de que no sería madre y no querría marido.
Crezco y avanzo, me cruzo con miradas e historias embucladas en un mismo recinto.
Un te quiero partido por dos piernas de mujer que se entrelazan en un mismo cuerpo que finge no conocer a ninguna.
Hombres cojín que poseen la habilidad de ver fútbol y porno en el mismo momento, a la par que fantasean con que su chica no se quite los tacones para follar.
He conocido hombres bosque que irradían primavera, pero se creen tan soles que les ciega su luz y les impide ver la del resto.
Conocí mujeres molde que se adaptan y son lo que esperan.
También hubo otras guerreras que se dejaron secar y no cambiaron a sus ojos, pero nunca miraron la verdad para ver que a todos nos gusta gustar y eso también moldea.
He visto hijos que son padres, otros que son inquilinos en las casas que habitan y otros que son maravillas que cuando se van dejan vacío el nido y el hombre cojín sigue comprando tacones mientras la mujer molde guarda lágrimas porque se esperan risas y debe ser.
Aún no sé qué tipo de mujer soy y no juzgo, pero la vida desde pequeña me advierte que puedo ser molde o mueble y ante la duda y por ahorrarme el fallo - llámeme cobarde - entendí desde pequeña que no podría perdonármelo y que yo siempre prefiero pedirme permiso a tener que pedirme perdón.

lunes, 19 de marzo de 2018

A todos aquellos que me llamaron bipolar.
A los que tuvieron miedo.
A los que no supieron como abarcarme.
Lato; debajo de ésto soy.
Soy mucho más que un torbellino del que nunca se sabe cuándo llegará.
Vosotros no lo sabéis, pero yo no puedo olvidarlo.

viernes, 16 de marzo de 2018

Despego para despejarme y entender que hay algo más que ésto que intento ser sin necesitarlo.
Así que vuelo, de nuevo, porque necesito aire limpio que llene mis pulmones.

martes, 30 de enero de 2018

Crezco, 
se acerca la primavera y yo florezco.
Nazco como árbol perenne.
Ha dolido, el pasado a los hombros.
Pero soy fénix.
Me busco mujer y me hallo niña que crece.
Es un momento, un instante, este presente en mi vida.

martes, 2 de enero de 2018

De mayor quiero ser mujer,
mujer implica, para mi tantas verdades, tanto futuro, tanto coraje que da vértigo.
Cuando yo de pequeña era niña no sabía lo crudo que iba ser hacerse mayor,
la maravilla de hacerse mujer.
De mayor, quiero ser Curie, pero tampoco quiero dejar de ser Frida.
Hay un término medio, casi exacto.
Éste se mece entre tenaz y dulce.
Éste es lágrima y fuerza.
Sé que soy mujer, porque me miro vagina,
me siento fémina.
Pero ser mujer es más que eso,
más que lo que establecen,
más que lo que luchan.
Tú eliges, mujer, qué tipo,
tú eliges, si miedo en calle, o puño en alto.
Tú eliges hasta en la "sin-elección".
Elegir, que genere debate ser mujer,
elegirme, a mi, por encima de lo elegido previamente.
Me elijo persona, pero sobre todo,
raíz, tierra, flor, madre, abuela, hermana, prima.
Soy mujer, y ¡qué inquebrantable suena!
Mujer, la palabra me pone,
veo las curvas, dos pechos anidando a ella que también somos golondrina.
Me veo sóla, libro en mano,
muchacho en falda.
Me veo, como quiero, porque soy mujer que elige,
mujer que libre,
mujer que lucha, mujer que piensa.
Somos madres del planeta, parimos futuro,
educamos hermana, hermano, primo, hijo y cuñado.
No olvidamos, ni perdonamos, no somos santas ni putas.
Soy mujer, porque me siento viva.

miércoles, 29 de noviembre de 2017

Hablo con un instante-presente que podría ser futuro.
Le digo que de mi boca a veces salen golondrinas.
Y recuerdo cuando cerrándote los ojos, te dije vergüenza en voz que a veces canto.
Recuerdo estar sobre tus piernas, cigarro a medias, terraza.
Recuerdo cantarte y tu sonrisa.
Recuerdo tú diciéndole al mundo, "¿la has oído?" y yo gemir de alegría.
Qué putada que sigas tan dentro que quisiera volver a sentarme acurrucada en tu pecho y decirte de nuevo... "Me he preparado la mejor canción que jamás hayas oído".

miércoles, 22 de noviembre de 2017

En bucle.
Cabeza arriba, abajo.
Lloro en el almacén de un lugar frío rodeada de personas cálidas.
Cojo metros, sonrío.
Aplaudo a músicos que le cantan al amor.
Recojo hojas de otoño.
Corro a pleno pulmón con mi cervatillo.
Beso e intento amar.
Es la lucha.
Mi lucha, por conseguir recogerme.
Volverme a formar.
Creer, quiero creer, a pesar del dolor,
por encima del dolor.

martes, 21 de noviembre de 2017

No paro,
abarco lo que puedo, más de lo que quiero, por no parar.
Si paro, llega la angustia, las pesadillas del lunes; si paro, se alargan hasta el martes.
Avanzo, por no ser estatua,
por aquello de la ansiedad y la ayuda que me da la calada maestra que todo lo calma.
Pero ésta pasa, y yo paro, y llega la noche.
En la oscuridad no hay monstruos,
pero hay
pesadillas.

Yo, que huyo de ti,
que no hay dios que se escape a tu recuerdo.
Te acercas distante y yo tiemblo.
Abrazo utopía de futuro pasado.
Grito esperanza y se me desgarra el corazón.
Sigo sin saber abarcar y sin embargo,
y a pesar de todo,
todos mis futuros, hasta ahora,
son contigo - en su defecto, ahora, conmigo-.

lunes, 30 de octubre de 2017

Debes saber algo,
algo pequeño, insignificante.
El 23 de octubre,
ese día algo explotó en mi pecho.
Una bomba camuflada de flores,
envuelta en pétalos.
¡BOM!
A tomar por culo mi hogar,
mis riendas.
¡BOM!
Segunda bomba camuflada.
A tomar por el jodido culo el coraje.
¡BOM! ¡CONFETI!
Mi mejor fiesta sorpresa.
¡BOM!
Hospital, urgencias, cuarta puerta a la derecha.
Me desangro, rota.
Me han amputado las últimas prótesis de ventrículos que me pusieron.
¡BOM! gritan los vecinos.
¡BOM BOM BOM! que lloraba.
¡BOM! la puta bomba de Gaza en mi pecho.
Jodidos problemas del primer mundo
me repito.
Pero los vecinos llaman a urgencias.
Grita ¡BOM! y se inunda la casa.
¡BOM BOM BOM!
A tomar por culo.

domingo, 29 de octubre de 2017

No he dejado de hacer nada de lo que hacía desde que me dejaste - rota-.
Fumo más,
follo más,
las uñas peor.
Pero sí
amo menos,
con más miedo.
No he dejado de hacer nada de lo que hacía antes.
Aprendo más,
a vivir más conmigo,
menos contigo
más con tu recuerdo.
Piso adoquines y no hay playa,
pero fumo más,
follo más,
las uñas peor.
Pero sí
amo menos,
con más miedo
a repetir los errores,
a bajar la guardia,
a que me vuelvan a partir en pe
                                                         da
                                                             zo
                                                                 s.

viernes, 20 de octubre de 2017

Con el tiempo me di cuenta.
El amor no lo es todo.
No quiero a una persona que me haga vibrar para luego, hacerme sentir que no vibro.
Quiero, me quiero.
Amo, me amo.
Ojalá pudiese olvidar, romper, gritar con la facilidad que tiene el verano para hacer llegar el otoño, pero no.
El amor no lo es todo.
El amor fuiste tú,
yo simplemente me quedé rota.
Tú increpante gritando que yo no suficiente.
Que yo mil puertas cerradas.
Y tú, hipócrita nocturno
besas otra boca - seguro sabe a nata y paz-,
tú mentiroso,
tú infiel de corazón - que no de piel-,
tú sueñas con cielos llenos de blancas nubes,
pero yo, aún, meciendo tu recuerdo me recuerdo y me grito que igual puta,
igual lejana, pero siempre mía, esa que no supiste ver y te dedicaste a imaginar.
Esa que hoy sigue, más lejana, más suya y tú ahora más suyo, más hipócrita, y yo más veraz aun que me duela.
Pero besa, ama, vive, vibra, muerde, desgastate en otro cuerpo, en otra alma, lija tu piedra como yo lijé la mía en ti.
Gracias; aún duele, pero al menos, amé, amé como nunca, como a nadie.

miércoles, 18 de octubre de 2017

Ésto es mío,
tan mío que sólo yo me puedo abrir a canal y cogiendo las partes infectadas, besarlas y escuchar - que no amputar -porque necesito de mis raíces para que crezcan mis ramas.

martes, 17 de octubre de 2017

He tirado del freno de mano,
pisado el embrague,
cambiado de marcha.
Lejos del mundo,
de las noches de cama y sudor
(te) observo dentro de mi.
Aún siguen las pesadillas,
tú.
Admito que ahora es el momento de asumir que no hay otros ojos, otro café aguado, otra radio que suene por las mañanas como tú.
Eso duele, pero yo sigo aquí.
Primero yo,
volver a creer que la magia existe en unos ojos lejos de los tuyos y eso necesita de mi.
Primero yo, amarme a mi, después el resto.
Sigo lamiendo heridas, aprendiendo que el tiempo pasa y con fuerza cura.
Puede que no crea que los corazones tienen varios ventrículos para anidar tan pronto, pero creo que con los segundos suficientes el nido cae, llega el invierno y luego las golondrinas.

lunes, 16 de octubre de 2017

viernes, 6 de octubre de 2017

Otra noche de tormenta, el miedo a la pesadilla, mi Freddy Krueger personal, mi nada, su todo.

miércoles, 4 de octubre de 2017

Ojalá pudiese escribirte para decirte que estoy conquistando Madrid.
Contarte que me siento tan fuerte y grande como un águila planeando por encima de mi vida.
Decirte entre cerveza y cerveza que gracias por ser mi amigo, por mirarme feliz mientras vuelo.
Ojalá fuésemos otros y no éstos que somos, tan tristes, tan lejanos y ajenos al pasado; tan borrador que no puede arrebatarle al folio que ahí hubo una historia, unas letras, un puto bolígrafo con tinta a dos colores que se mezclo para ser un maldito punto y final lleno de sangre.

jueves, 7 de septiembre de 2017

Una vez sentí miedo, tanto miedo que me olvidé.
Tuve miedo de ser,
me aterró de la idea,
me rajó el alma, el cuerpo, los brazos y casi las venas.
Una vez, sentí pánico, tanto que quise respirar la muerte y ser eterna sin saber ser.
Otra vez, sin embargo, la vez definitiva me supe viva, vibrante.
Me vi luz y sombras,
me supe incógnita y puertas
y decidí abrirlas, para saberme entera.
Hoy, esta vez, ahora,
me sé plena,
llena,
menguante y creciente,
me sé de Venus y de Marte.
Me reafirmo, por miedo a olvidarme,
de nuevo.
Creo que eso me hace más mía,
más consciente y al final, el miedo
la necesidad de reafirmarse en lo que se sabe,
eso y entenderse en cambio constante te hace más tuya que de nadie

sábado, 2 de septiembre de 2017

Tú no sabes y yo no sé,
y no debo pero siento.
Y ahora es cuando se complica la sencillez de mirarnos a los ojos.
Me gustas.
En este momento es cuando debo cortarme la lengua para no decir(te) lo;
pero tengo manos.
Me gustas.
Y a veces se para el tiempo y quiero cortarlo, meterlo en una cajita y guardarlo.
Me gustas.
Tú Quijote, tú callado,
tú risa, tú inseguro.
Pero... ¡me gustas!
Y no lo callo, grito, pataleo
y me encierro en el silencio.
¡ME GUSTAS!
Te miro,
y sin lengua para gritarlo,
ni manos para escribirlo espero que lo entiendas.

jueves, 31 de agosto de 2017

Vivo la duda.
Dudo si hago bien yendo a la luna o si es mejor quedarme en Marte.
Tengo miedo, recuerdos, un nudo subiéndome por la garganta, cerrándome la tráquea e impidiéndome salir.
Tengo miedo, estoy acojonada y estoy tranquilamente sola disfrutando de verme a mi enfrentándome a mi vida.
Venceré, encontraré caminos, lugares, personas, cobijo y a mi.
Tengo el mundo entero frente a mi, retándome, gritando que no voy a poder hacerlo, pero tiembla, leve y sigiloso, tiembla.
Sabe que cojo carrerilla, que me abrazo, me beso, me grito que amo, que amo y tengo el pecho lleno de risas y entonces tiembla, porque sabe que puedo.

El fin del verano.

Tú eres aire; esa clase de corriente fresca que trae el fin del verano,
que te obliga a arroparte y te destapa el corazón.
Ha cambiado la presión y has aparecido relampagueante entre truenos y lluvia
refrescando todo el suelo por el que piso.
Has limpiado de un soplo todas las flores mustias de mi pecho 
y te has hecho con la fórmula para descontrolar mi sístole-diástole.
Puede que aún no sepas, que de tu pelo salen pájaros que quieren volar
tan alto y batir sus alas tan fuerte que te elevas como si nada siendo tan mortal,
tan silencio, que a veces quién no mira con ojos de gato no ve el fuego que llevas dentro.
A fin de cuentas puede que los lunes no sean tan malos.


sábado, 12 de agosto de 2017

A veces hay que retroceder,
coger carrerilla para saltar el precipicio.
Los planetas chocan y de ahí salen las estrellas.
Me marcho.
Regreso.
Necesito oxígeno, respirar, vivir.
Tengo el corazón encogido del miedo.
El miedo que tienen los valientes.

martes, 8 de agosto de 2017

Te has ido, sincero y con estela.
Y yo aquí sincera y polvo.
Dices con pecho abierto que puedo entrar en él a coger fuerzas y yo no veo flores.
Te perdí porque corriste y me dejaste atrás llorando, perdida sin esperarme.
Y ahora tú con casa construida en el camino me ofreces techo para la lluvia y yo no quiero.
No me hagas decir que no puedes ayudar a sanar la herida con el cuchillo en la mano.
Si miras mi pecho ves flores y mariposas que juegan con libélulas y caléndulas y geranios nacen de mi risa y el mundo se vuelve claro y el cielo se llena de estrellas que son pecas y el lucero es el hoyuelo izquierdo de mi cara.
Sigues la estela del cometa Haley y ves polvo, ves como se descompone la estrella y las flores se pudren y ahí, justo en el momento en que las mariposas se vuelven gusanos muriendo al revés, se cierra una puerta que conecta con el ventrículo izquierdo y se pudre la sangre y se ven negros los pulmones y se encharcan de sangre y la vida no tiene risas ni estrellas ni pecas.
Eso duele y destruye.
Ahora toca nacer, se acerca el otoño, aún queda el invierno para volver a ser primavera.
Mírame clara y ahora sí, debes saber que necesito de mi más que de nadie y tú, tu casa, tu mano, tu pecho, tu cuchillo y mi herida deben esperar a que se descongele el hielo, a que caigan las hojas, se hielo el árbol y brote la rama y la mariposa dejará de ser gusano y tal vez cuando vuele en busca de la libélula yo pueda tomarme un café bajo tu techo viendo llover.

lunes, 24 de julio de 2017

Me tengo que perdonar.
Perdonar fallarme.
Perdonar haber dejado de ser.
Y perdonar haberme dejado ser.
Perdonar haberme perdido.
Sobre todo por volver a encontrarme.
Me miro dentro y me veo llorando
rota de impotencia.
Y me miro leve sintiendo pena de esa
que no es otra que yo.
Perdonarme es más difícil que perdonarte.
Perdonarme es asumir mis errores y ser consciente de que no hay marcha atrás.
Perdonarme y asumir la culpa y asegurarme no volver a hacerlo.
No volver a hacérmelo que no es otra cosa que intentar no volver a fallarme.
Pero también me tengo que perdonar el perdonarme, porque eso, el saberme fallada por otra que no es más que yo, esa incondicional que se debe amar y ser-se fiel, ese es un reto que sólo puede asumir una misma.

viernes, 21 de julio de 2017

Debo ser, pero soy.

Debo ser diosa manchada de fresas y nata.
Debo ser risa temprana.
Debo ser muleta, camastro y orgasmo.
Debo ser mujer ideal-platónica.
Pero soy mujer.gato.pez.
Soy mil puertas cerradas.
Soy primavera en el ojo del huracán
y soy huracán entero.
Soy guerrillera desde mi trinchera,
agito estandarte de flores y puñales.
Incendio un par de veces por semana lo que toco.
Pero debo ser florero que agita flores,
debo ser cerveza fría y muslos calientes.
Debo ser luchadora de causas perdidas.
Debo ser psiquiatra y psicóloga.
Pero soy.
Soy café, sólo y con un hielo.
Soy baile y sudor.
Soy falda y pantalón.
Soy maletín y bolso.
Soy persona.mujer.guerrillera.pez.gato.pájarosinjaula.
Pero sobre todo, soy aquello que no ves porque estás imaginando lo que debo ser.

domingo, 16 de julio de 2017

Eres estela, magia y polvos.
Estás hecho de todo aquello que da valor.
Eres la medida exacta entre crueldad y magia.
Pero tú siempre eliges crueldad, te proteges contra ataques inexistentes y vives tu vida esperando el fin del mundo y así, tú, acabas con él.
Y ni siquiera reparas en que verte de lejos mientras eres, es como ver a un ciervo fuerte y delicado.
Te empeñas en ser lija cuando eres terciopelo.
Quieres ser sin saber que ya eres.
Y me miras a mi ojos de niña en cara diciendo que tengo el pecho lleno de risa y bondad y eso te atormenta y acompleja y crees que estar a mi lado un día te hará valiente, pero no ves que ya lo eres, que, ¡maldita sea! Abrazas la vida y te la Comes a mordiscos sin darte cuenta y eso, mi vida, es mágico, pero tú no lo sabes, porque como todos los magos no concibes el mundo sin magia.
Así que VUELA, que yo TE VUELO, ni si quiera me pienso quedar esperando la caída, porque no vas a caer.
Eres inmenso, eterno, infinito, tienes el puto universo a tu espalda, y por eso te duele, por el peso del futuro.
Amor, amigo, pasado, VUELA, porque naciste con alas.
¡Bendito mortal eterno!
No sabía si los hombres existían y te conocí a ti, siendo poesía y cerveza, diciendo verdades como un niño, incluso aunque fuese tu verdad, pero era absoluta.
Así que no me juzgues, no me ates, no me mientas, porque yo también vuelo y veo vida en cada paracaídas y en cada mujer con bicicleta y creo en la magia.
Amantes inútiles que no se supieron follar bien las almas, pero lo que descubrí entre poemas rotos fue a ti.
Las casualidades existen y tú, amante-amigo-mago-guerrillero-bufón-pasado eres un maldito colibrí que bate sus alas y cambia el mundo.

Me niego, a escribirte un poema y decirte que hoy soñé mi realidad.
Que era una vieja historia al lado de ella, tan desecha y raída en tu boca que entre susurros le contaba a alguien que era risas y boca dulce y nueva.
Hoy me soñé recuerdo tuyo muy lejos de tu pecho que ya no anidaba tréboles.

miércoles, 12 de julio de 2017

Ojalá.
Voraz.
Veraz.
Fugaz.
Ojalá.
Poesía y tú.
Ojalá en otro mundo y otras calles y otras personas haciéndolo bien.
Ojalá brindando por ellos.
Voraz.
Veraz.
Fugaz.
Ojalá yo superando mi chernobil.
Ojalá algún día voraz, veraz, fugaz.

sábado, 8 de julio de 2017

Hoy he sido sincera conmigo misma.
Me he destapado quedándome sólo con mi piel y te he dicho que fui un monstruo de dos manos que aún siendo mías dejé que fuesen de otros.
Hoy me he mirado a los ojos y me he visto convirtiéndome en Frida y mi madre.
Hoy me he visto vacía e insípida y me he cogido por los hombros y sacudiéndome me he gritado que soy máscara y risas, pero debajo de eso lato y a eso soy fiel.

viernes, 30 de junio de 2017

Carta: "Lo que siempre se escribió pero nunca a ellos."

Hace años me prometí a mi misma sin ser consciente de ello que en algún lugar, en el momento concreto, quizás al final de mis días estarías ahí.
Hice un mapa mundi y marqué el recorrido que tendrían nuestras vidas y el punto en que se unirían.
Realmente, después de hacerlo perdí interés y llego la brisa y hundí mi cara en su sonrisa, perdí el control y me resigné a la felicidad completa teñida de castaño, entre sus dientes y mordiscos.
A veces pienso cómo de injustos somos con nosotros mismos, como nos negamos sin motivo aparente aparte del miedo.
Hace dos noches recordé que me dijeron que nunca escribo la verdad y por eso suena incompleto y decidí escribirte en los ojos que tus labios son como nubes de algodón y que aún tu vena del cuello late con tal fuerza que hay que amarrarse a tu torso para no salir disparado.
Después de negarme por una desconocida que parece es tu brisa, tú te dejaste al sueño que creo esa noche fueron pesadillas, y yo mientras tanto trataba de sobrellevar el peso del beso entre tilas y cigarros.
Aún creo que no comprendes la profundidad, -porque creo que yo tampoco-,de lo que es amarte como ser sin plantearme la realidad de tu cabeza.
Ahora creo que lo mejor que me deja la vida es amar a pecho descubierto y entender la complejidad de la felicidad y el amor y cómo el no tener(os) es la mejor manera de amar.
Hoy que veo a mi brisa que es un aire voraz repleto de risas y buscando entre poesía el leve susuro de la vida siento que hay personas que merecen ser solas, ser completas y a veces compartir su estela con el mundo yéndose de forma fugaz.
Mientras tanto, tú y yo miramos la Luna, enamorándonos de ella parece ser, cuando sólo está llena y yo me planteo cual es la realidad de que sea eso lo que nos enamore. Por el momento sigues siendo un fantasma, mi fantasma, y yo sigo buscando e intentando hacer vida, espero esta vez que cerremos círculos, y seamos incapaces de tardar diez años y que Romeo y Julieta no mueran, y que Otto siga vivo y Sophie y Julen vivan para tenerse y retarse.
Y sí, tal vez, alomejor, puede, que nuestro destino no sea estar juntos, pero aún así si lo pienso se me parte el corazón y pierdo la fuerza que me hace creer que aún el amor es posible de forma palpable.